La llegada de Ronaldo es "un hecho de satisfacción para todos los vallisoletanos que nadie puede monopolizar porque es patrimonio de nadie los vallisoletanos", ha aseverado Carnero, quien ha criticado tanto la "actitud" como la "aptitud" del alcalde en representación de los vecinos de la ciudad al no haberle permitido intervenir en el acto.

"El Real Valladolid no es un club de la ciudad ni de la provincia, incluso ni de Carlos Suárez ni de Ronaldo, sino de todos los vallisoletanos allí donde se encuentren, de los que se fueron y de los que están por venir", ha insistido.

De hecho, ha confesado que si ha acudido al evento es porque el presidente del club, Carlos Suárez, le ha invitado, aunque Puente haya optado por "bloquear" a la institución provincial, "al modo en que está acostumbrado a hacerlo en redes sociales", ha asegurado.

"El deporte tiene el objetivo de tender puentes y de crear discordia", ha explicado el presidente de la Diputación, quien entiende que "el fútbol debe demostrar un 'fair play' que hoy no ha acontecido".

A pesar de ello, ha sido un día "histórico y de satisfacción para todos los vallisoletanos que, domingo tras domingo, acuden al estadio para demostrar su sentir a través del deporte" y que han asistido a la "primera piedra del futuro de ese buque insignia que es el Real Valladolid".

Asimismo, ha trasladado su enhorabuena a Carlos Suárez por haber conducido al club de vuelta a la Primera División y a Ronaldo por haber adquirido un club con una "dimensión histórica importantísima" --que ya ha alcanzado 90 años de recorrido-- pero "con una proyección de futuro aún mayor".