Castilla y León lideró el pasado año el incremento de los accidentes leves de tráfico con una subida del 2,59 por ciento con relación a 2017, hasta los 93.610 siniestros, porcentaje que contrasta con el incremento nacional del 0,11 por ciento, donde en 2018 se registraron 1,93 millones de siniestros de ‘chapa’, según datos recogidos por la Asociación Empresarial del Seguro (Unespa).

A pesar de que se trata de la cifra más alta registrada tanto en España desde 2010 y en Castilla y León desde 2011, los golpes de ‘chapa’, un claro reflejo de la densidad del tráfico en las ciudades, aún se está lejos del alcanzar los niveles previos antes de la crisis, ya que en el caso de la Comunidad en 2007 se contabilizaron más de 113.000 siniestros y 2,2 millones en el conjunto de España.

Tras Castilla y León, las comunidad donde más aumentaron las colisiones el pasado año fueron Canarias (2,28 por ciento), Madrid (2,12 por ciento) y Aragón (1,98 por ciento). Los accidentes sólo bajaron en cuatro regiones: Asturias (-2,05 por ciento), País Vasco (-0,96 por ciento), Castilla-La Mancha (-0,64 por ciento) y Navarra (-0,59 por ciento).

Si este análisis se efectúa por provincias, Segovia (+8,12 por ciento), Soria (+5,33 por ciento) y Salamanca (+4,38 por ciento) lideran las subidas a nivel nacional, mientras que los mayores descenso se registraron en Albacete (-2,69 por ciento), Teruel (-2,29 por ciento), Guipúzcoa (-2,12 por ciento) y Asturias (-2,05 por ciento).

Los territorios más poblados son los que anotan una mayor cantidad de accidentes en términos absolutos, algo natural dado su peso demográfico. La clasificación la lideran provincias que albergan grandes núcleos urbanos. Es el caso de Madrid (253.206 colisiones), Barcelona (199.338) y Valencia (100.998).

Por provincias, Valladolid se situó en cabeza con 20.623 colisiones leves, lo que supone un promedio diario de 57, por delante de León, con 18.501 y una media diaria 51. En Burgos (15.018) el promedio baja hasta los 41 accidentes y en Salamanca (11.949) hasta los 33. Soria (3.156) registró un promedio de nueve accidentes, el más bajo de todo el país, mientras que en Zamora (5.963) y Palencia (5.937) la media diaria fue de 16, mientras que en Ávila (6.206) y en Segovia (6.257) fue del 17.

Los accidentes leves también varían en función de la época del año y los días de la semana. Los periodos vacacionales presentan menos incidentes porque los golpes de chapa son típicos del tráfico urbano y este se hace menos denso en los momentos de descanso. Agosto fue, en concreto, el mes más tranquilo del año (142.296 casos). Le siguió diciembre (147.612). El bajo peso de febrero (147.989) se debe a que ese mes sólo tiene 28 días, no a una menor siniestralidad por jornada. El momento más problemático del año fue octubre. Entonces hubo 177.547 choques entre vehículos.

La estacionalidad por días de la semana es también un reflejo del comportamiento colectivo de la gente. El viernes es la jornada con más golpes de chapa en las ciudades, por delante de los lunes, mientras que las colisiones caen una tercera parte los fin de semana, hasta tocar un mínimo los domingo.