Un texto sin candados

SPC
-

Ana Pastor hace alusión en su alocución a los altos logros de libertad y prosperidad alcanzados con la Ley de Leyes, al tiempo que señala que el documento de 1978 es perfectible

Un texto sin canditados - Foto: Kiko Huesca

Orgullosa de la Constitución y plenamente satisfecha con los logros alcanzados durante estas cuatro décadas de constitucionalismo. Así se expresó ayer la presidenta del Congreso, Ana Pastor, en el Hemiciclo durante el discurso de homenaje a la Carta Magna en su 40 cumpleaños, al asegurar que el texto de 1978 «nunca ha sido un candado», al tiempo que reconoció que, 40 años después, es «perfectible» y admite reformas, pero subrayó que, para cualquier decisión que se adopte, es preciso aquel «espíritu de acuerdo, concordia, diálogo y colaboración» de la Transición. 

«Hoy es el momento de que todos los españoles renovemos ese gran Pacto Constitucional, es lo que el pueblo español demanda a sus representantes. Porque la Constitución ha sido, es y será la mejor guía para encauzar los retos que, como nación, nos depara el futuro», señaló. 

Ante los Reyes y parlamentarios actuales y de la Transición, Pastor indicó que los españoles deben felicitarse por la vigencia de la Carta Magna «porque con ella se ha cimentado la estabilidad democrática que ha permitido construir los mejores 40 años de nuestra Historia». 

En su discurso, la presidenta de la Cámara Baja tuvo palabras de agradecimiento para el Rey que la promovió y firmó, Juan Carlos I, y para su esposa, la Reina Doña Sofía, «por tantos años de servicio y entrega a España». Recordó al entonces presidente Adolfo Suárez, «ese gran político», y quiso también integrar en su discurso citas históricas de figuras relevantes de la Transición como el socialista Felipe González, el comunista Santiago Carrillo, el nacionalista catalán Josep Tarradellas, y los llamados padres de la Constitución, entre otros. 

A su juicio, aquel «compromiso de entendimiento, concordia y reconciliación para que nadie quedase excluido, forjó el consenso, la herramienta más útil, y «ese consenso permite reivindicar y hablar con orgullo de nuestra Transición como un admirable logro político que debe perdurar». 

Según destacó, a lo largo de estas cuatro décadas y con distintos presidentes, la Carta Magna ha facilitado crear el Estado de las Autonomías, ha puesto en marcha el Estado europeo más descentralizado y próximo a los ciudadanos, ha permitido desarrollar el Estado del Bienestar, y ha sido determinante para sofocar «una intentona golpista» y resistir los embates del «lacerante y constante ataque terrorista».

Su conclusión fue clara: España acertó con el marco institucional del que se dotó en 1978. «No quiero caer en ningún triunfalismo, pero no hay duda de que España es hoy más libre y abierta, más próspera y solidaria», sentenció. 

Ahora bien, también sostiene que la Constitución, como toda obra humana, «es perfectible y admite reformas», y de hecho «nunca ha sido un candado». ?