La muerte de un bebé en un accidente en la A-62 cierra el peor verano desde 2009

A. G. Mozo
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El niño, de siete meses, falleció en el Clínico poco después de que el coche en el que viajaba con sus padres se saliese de la vía en Cigales y volcase · El verano se cerró anoche con seis víctimas mortales, el doble que en el de 2014

Un bebé de siete meses -cumplía ocho el próximo día 7- falleció la noche del pasado domingo en el servicio de Urgencias del Hospital Clínico de Valladolid, poco después de sufrir un accidente de tráfico en la A-62, a su paso por el término de Cigales. El niño, de nacionalidad portuguesa, viajaba con sus padres a bordo de un BMW 530 cuando se salió de la carretera a la altura del punto kilométrico 115,700 de la Autovía de Castilla.

 

En concreto, según informaron a El Día de Valladolid fuentes de la Guardia Civil de Tráfico, el siniestro se produjo a las 23.15 horas en la vía de servicio, en un tramo que se encuentra limitado a 40 km/h; por causas no aclaradas, el vehículo (con matrícula  francesa) se salió de la carretera y terminó volcando. El bebé fue evacuado en una UVI Móvil pero no conseguía superar las graves lesiones que presentaba. El padre, de 27 años y también de origen portugués, fue el que salió mejor parado del accidente -solo sufrió lesiones leves-, mientras que la madre, de 30 años de edad, aún permanecía ingresada ayer en la UCI del Hospital Clínico con pronóstico «grave», aunque ya «consciente y estable», tal como detallaron a este periódico fuentes de Sacyl.


Operación verano. Con la muerte de este bebé portugués son ya seis las víctimas de tráfico registradas durante este verano en las carreteras de Valladolid, en lo que constituye el peor dato desde 2009, cuando fallecieron nueve personas.

 

En concreto, entre el 1 de julio y el 31 de agosto se han dado tres siniestros mortales con los seis muertos ya citados. El accidente del bebé de anteayer se suma a la muerte de un hombre de 60 años, el pasado 13 de julio en la autovía A-6 (a la altura de Tiedra), donde se empotró contra un camión a las tres de la madrugada; y a la de cuatro personas en una colisión frontal en la carretera de Cigales, la tarde del día 2 de julio.

 

Son justo el doble de muertos en carretera que los registrados en el mismo periodo de 2014, cuando ‘solo’ se perdieron tres vidas; en 2013 y 2010 fueron cinco, por las cuatro de 2012 y 2011. Echando la vista un poco más atrás, durante el verano de 2003, por ejemplo, llegó a haber hasta quince muertos.
Las seis víctimas mortales de este verano (en tres accidentes) se unen a los ocho fallecidos con los que las carreteras vallisoletanas habían cerrado el primer semestre del año y que ya anunciaban un pésimo año para la estadística de la DGT.

 

Y es que mientras en todo 2014 ‘únicamente’ murieron nueve personas, en este año, a falta de los cuatro últimos meses de 2015, ya van catorce. En la comparativa concreta de lo que va de año -con datos entre el 1 de enero y el 31 de agosto-, los datos recabados en fuentes de Tráfico desvelan que mientras los accidentes mortales han subido un 66% (de los seis de 2014 a los diez contabilizados en 2015), los fallecidos han crecido un 133% (pasando de seis a 14) y los heridos se han multiplicado, de cero a tres.

 

Excesos de velocidad. Respecto a las causas, de los diez accidentes mortales que se han contabilizado en Valladolid en lo que va de año, la mitad tienen detrás un exceso de velocidad. De los otros cinco, tres se debieron a la distracción (o somnolencia) del conductor de uno de los coches implicados, en uno había drogas y alcohol, mientras que la lista se completa con otro provocado por no respetar la prioridad.