Una campaña que puede ser muy corta. La Asociación Micológica de Valladolid advierte de que la recogida de setas en la provincia de Valladolid puede verse reducida de manera notable debido a la llegada de las primeras heladas del otoño. «La campaña se ha retrasado ya un mes debido a que las lluvias se han retrasado mucho y ahora encima han llegado las primeras heladas», manifestó el presidente de la Asociación Micológica de Valladolid, Aurelio García.
De esta forma, puede que la campaña sea especialmente corta en el tiempo. A esto hay que sumar que una treintena de municipios, como ya ocurriera el año pasado, regularán sus montes a través del proyecto Myas RC, puesto en marcha por la Junta y la Diputación. Esta regulación se basa en que todas aquellas personas que pretenden recoger setas dentro de sus términos municipales están obligados a obtener un permiso para hacerlo.
Estos permisos van desde los tres euros para los vecinos de las localidades hasta los 240 euros en el caso de que se recolecten las setas para uso comercial. Los municipios que ya han regulado sus montes pertenecen fundamentalmente a la zona de Montes Torozos y Pinares. «En Valladolid principalmente se busca el nícalo y está en Pinares y Torozos y fuera de estas zonas no existe la suficiente riqueza micológica como para regular la recogida», señaló García.
Los permisos se pueden conseguir bien a través de internet (www.myasrc.es), o bien a través de los distintos puntos de expedición que hay a lo largo de la provincia. Junto con el permiso de recolección también se obtiene la guía del recolector y la guía específica.
Los pueblos que regularán esta temporada la recogida de setas serán Valdenebro de los Valles, Aldeamayor, La Parrilla, Portillo, Camporredondo, La Pedraja de Portillo, Íscar, Matapozuelos, Mojados, Olmedo, Pedrajas, San Miguel del Arroyo, Valdestillas, Viana, La Zarza, Montemayor, Quintanilla de Onésimo, Tudela, Traspinedo, Viloria, Villabrágima, Villalba de los Alcores, Cogeces del Monte, Quintanilla de Arriba, Mayorga, Torrescárcela y Castromente.
Sin embargo, desde la Asociación Micológica se muestran en contra de esta regulación al considerar que los precios son abusivos. «Sí estamos a favor de que se regule la situación, pero más por peso de recolección diario que por un dinero que nos parece excesivo», concluyó García.