Valladolid quiere ser referente en el uso de las energías sostenibles. El Ayuntamiento ha actualizado recientemente la normativa local de Protección del Medio Ambiente Atmosférico con el objetivo de que la contaminación «sea mínima», pero también para «proteger» los recursos naturales y el Medio Ambiente en su conjunto. Esta puesta al día del reglamento municipal también era necesaria porque la ratificación del Pacto de los Alcaldes requería de un traslación normativa para tener la adecuada cobertura legal a la hora de aplicar nuevas medidas y normativas municipales. 

En ese sentido, se apuesta por el «uso eficiente» de la energía, promoviendo una «transición energética local» hacia el «uso de intensivo» de las energías renovables y el autoconsumo eléctrico. Además, se ratifica el compromiso que se alcanzó en el Pleno, a finales de 2016, de incrementar de forma paulatina el uso de energías de origen renovable, de una forma eficiente, que evite el exceso de potencia instalada y el mal uso de las fuentes primarias.

La Concejalía de Medio Ambiente mantiene su objetivo de reducir en un 20% las emisiones de la ciudad  para cumplir su compromiso con el Pacto de Alcaldes. Para eso se elaboró un Plan de Acción de Energía Sostenible, que refleja que la ciudad tiene un consumo de energía de 26,6 MWh per cápita. Una cifra que el Ayuntamiento quiere contribuir a rebajar con políticas sostenibles que, de momento, van desde e la sustitución de luminarias a la racionalización de los horarios de consumo. Esto ha ayudado a lograr un descenso del 28,78% en el consumo de kW desde el 2012, lo que supone casi 15.000 MW menos y unos 2.550.000 euros de ahorro. 

Además, se está aplicando un plan de instalación de paneles solares en edificios municipales, como polideportivos o centros cívicos. Así, se han instalado cinco plantas de gestión energética a demanda en los edificios centro cívico Zona Sur, José Mª Luelmo, el edificio que acoge las dependencias del Servicio Municipal de Limpieza y el centro cívico José Luis Mosquera. También se ha renovado en los dos últimos años el alumbrado de los centros cívicos Delicias, Zona Este, Pilarica de la Casa Revilla, de las dependencias del servicio de Parques y Jardines y el alumbrado exterior de Casa del Barco, entre otros.

El Consistorio también ha puesto en marcha otras iniciativas para la optimización de la factura eléctrica. Un ejemplo son los ahorros conseguidos en la fuente cibernética de la plaza Zorrilla, donde la reducción de la potencia contratada de 140 kW a 80 kW ha supuesto ahorro de 1.460,83 euros al año. En la fuente  también se ha instalado una batería de condensadores autorregulada, que garantiza un ahorro de  2.460,87 euros al año.

Una política energética sostenible que la Agencia Energética Municipal (Aemva) fomenta con la extensión de medidas de  eficiencia energética relacionadas con la reducción del consumo de electricidad en otros campos. Algunas se centra en reducir el consumo eléctrico en iluminación comercial en un 50% respecto a 2010 y mejorar la eficiencia energética en las pequeñas y medianas industrias en el municipio. 

De hecho, este mismo mes se ha realizado una jornada de eficiencia energética en pymes y comercios, donde se han explicado las opciones para conseguir ahorros de un 20%, que en el caso de la climatización pueden llegar hasta el 50%. Aemva propone aplicar cambios en la tecnología de los sistemas de iluminación interior de los edificios y decantarse por las lámparas compactas de bajo consumo y las de tecnología LED. «Desde la Concejalía se pretende, además, predicar con el ejemplo en la transición hacia un nuevo modelo y no solo a través de la flota de vehículos, que va prescindiendo de combustibles más contaminantes, sino que en los edificios municipales se ha redoblado el esfuerzo por la autosuficiencia energética, fundamentalmente a través de energía solar fotovoltaica, lo que está suponiendo un importante ahorro para las arcas públicas», apunta la concejala de Medio Ambiente, María Sánchez. 

ahorro en edificios.  Aunque el proyecto de referencia en ahorro energético desarrollado en la capital, con gestión municipal y fondos europeos es en el polígono de viviendas de Fasa, en la carretera de Madrid, donde se ha realizado una  amplia rehabilitación energética, a través del suministro de energía con renovables y paneles fotovoltaicos. El conocido como plan Remourban ha optimizado el consumo y está permitiendo un mayor control del gasto energético a los vecinos.