Mucha participación, de libreros y lectores, durante toda la jornada de la fiesta de las letras. El Día del Libro tuvo su epicentro ayer en la plaza de España donde numerosos libreros participaron en la tradicional feria de las letras, que sustituía al mercadillo diario de la fruta y verdura de esa marquesina. El Gremio de Libreros de Valladolid, junto otras librerías de la ciudad, cada colectivo en cada una de las dos marquesinas, acudieron a la tradicional cita donde miles de personas acudieron durante toda la jornada ante el atractivo 10 por ciento de descuento, además de invitarles a degustar pastas e incluso a algunos compradores les regalaron una planta.

Esta iniciativa, organizada desde este año por el Ayuntamiento, fue el prolegómeno a la gran cita anual del libro en la ciudad:la Feria del Libro que se celebrará entre el próximo viernes y el 5 de mayo en la Cúpula del Milenio.

Libros de lectura local, nacional e internacional y muchas ediciones de literatura infantil se adquirieron ayer aprovechando la promoción en un momento en que el sector no atraviesa precisamente su mejor época ante una caída de las ventas el año pasado del 15 por ciento. Además, el Ayuntamiento acompañó las compras y la lectura con actos culturales, destacando el homenaje al IVCentenario de las Novelas Ejemplares de Miguel de Cervantes.

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Pero la ciudad vivió ayer más actividades. La más entrañable, una performance basada en la escena final de ‘Fahrenheit 451’ en apoyo a la Librería Relieve, en cuyo entorno de Poniente se dieron cita numerosas personas, a primera hora de la tarde, leyendo un libro y dejando un mensaje escrito al histórico librero que cerrará ese local en los próximos días para incluirse en el mercado provisional del Val.