Amancio Moyano, actual presidente de la Denominación de Origen Toro, afronta por segunda vez la presidencia de la Conferencia Española de Consejos Reguladores Vitivinícolas (CECRV). Un cargo en el que le han ratificado recientemente los máximos responsables de 54 zonas vinícolas de todo el país y que representan el 98 por ciento del volumen de vino amparado y comercializado por DO. Entre sus principales retos: conseguir que aumente el consumo de vino en España tras el descenso registrado en los últimos años, sobre todo entre los jóvenes.

Acaba de recibir de nuevo la confianza de los máximos representantes de los consejos reguladores vitivinícolas de España, ¿qué cree que han valorado?

Un poco el trabajo que se ha llevado a cabo por la ejecutiva actual. Se han cumplido las expectativas que tenía la asociación de estar pendientes de todos los temas a nivel nacional y creo que es una apuesta por la continuidad.

¿Cuáles son los principales objetivos que tiene el sector para 2016?

Vamos a dar continuidad a lo que veníamos trabajando los años anteriores, principalmente en un tema que preocupa a todo el sector vitivinícola en España como es la falta de consumo de vino a nivel nacional. Creo que es una asignatura pendiente y ahora de nuevo vamos a iniciar una nueva campaña que se presentará en enero de 2016 con el objetivo de acercar el vino a los consumidores en general y a los jóvenes en particular. Es complicado ver a una persona de menos de 30 años disfrutar de una copa de vino y estamos preparando una serie de acciones con las que a ver si somos capaces de cambiar esa tendencia de consumo de vino en nuestro país y si es posible incrementarlo. Creo que es una función bastante importante y cuenta con la implicación de todos los consejos reguladores vitivinícolas de nuestra asociación, una implicación económica que al final es como se demuestra si hay un compromiso o no lo hay, porque muchas veces de palabra se manifiestan pero a la hora de la verdad no se acaba demostrando.

¿Con qué presupuesto cuenta la campaña?

Es una campaña de tres ejercicios, el primero serán de 200.000 euros la inversión inicial, que es como un punto de partida y en el futuro se irán viendo las posibilidades de incrementar esas cuantías y depende de la valoración también.

¿A qué atribuye la caída del consumo del vino en España?

Si supiera la causa estaría más cerca de la solución pero es complicado. Una parte de culpa la puede haber tenido el propio sector, que en algunos momentos lo pongamos demasiado difícil para disfrutar de una copa de vino como si se tuviera que ser un enólogo, y no hay nada más lejos de la realidad, porque es una bebida que se debe tomar con moderación y disfrutar de ella sin más. También ha podido influir el tema de los precios en algunos casos con una situación económica en la que tampoco se facilita el consumo del mismo. Pero ninguno de estos factores creo que puede ser tan definitivo para que baje a la mitad o menos de la mitad el consumo de vino con lo que teníamos hace 30 ó 35 años. Al final hay que concienciar al público en general de las bondades y características del vino y que poco a poco se vayan acercando a él. Estamos convencidos de que no es una tarea con un resultado inmediato, que es a largo plazo, pero hay que poner empeño en ello todo el sector y las administraciones, y ver si conjuntamente se puede conseguir.

Ese mismo mensaje hay que transmitírselo a los jóvenes…

Efectivamente, el tema de los jóvenes es una de las asignaturas pendientes, donde se va a potencia a través de las redes sociales, que es como más fácil se puede llegar a ellos, para ver si somos capaces de concienciarlos de que es una forma más de divertirse y disfrutar siempre que se consuma con moderación, y que para nada tiene efectos nocivos o perniciosos como se ha querido hacer ver en algunas ocasiones. Y luego también el tema del precio, ya que la relación calidad-precio es extraordinaria y poco a poco se vayan acercando al consumo de vino, de una forma sencilla, fácil, sin poner requisitos, que cada uno que tome el tipo de vino que le guste, porque estoy convencido de que acabarán implicándose más.

Esta caída del consumo coincide con un momento en el que cada vez se vende más vino español en el extranjero…

Las exportaciones van creciendo gracias al trabajo de las bodegas y de las promociones que se están llevando a cabo desde los consejos reguladores, porque si esto no fuera así tendríamos un problema aún mayor del que tenemos, con un excedente muy importante en nuestro país. Es cierto que el trabajo que están llevando a cabo las bodegas es impresionante, prácticamente en todos los continentes hay alguna bodega española mostrando sus vinos. Eso está haciendo que crezca la exportación, no siempre a los precios que nos gustaría, también hay que tenerlo en cuenta, pero yo creo que para ser los más competitivos posibles por una parte hay que velar al máximo por la calidad y por otro dar a conocer. Dos facetas que son imprescindibles para generar rentabilidad tanto para la bodega como para el viticultor.

¿Cree que las denominaciones de origen de Castilla y León se ha convertido en una referencia en España?

Está claro que sí, es una referencia cuando se habla de vino de calidad, es una de las regiones que más zonas vitivinícolas tiene, más DO y más calidad. Se están haciendo bien las cosas, cada consejo con sus peculiaridades que es en definitiva lo esencial de una DO y al final no creo que es bueno dejarse llevar por modas que puedan surgir en cada momento, sino apostar por una calidad y una personalidad. Las cosas se están haciendo bien, aunque la realidad de la comercialización es que hay más oferta que demanda y los precios no son los que nos gustaría que fueran.

¿Cómo son las relaciones con el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente?

Ahora mismo problemas no hay ninguno, hay que reconocer que la comunicación existe desde hace un año y medio aproximadamente. Yo creo que se facilita bastante el trabajo a la hora de conocer lo que pasa en el sector del vino, porque hay que ser conscientes de que la asociación representa prácticamente a la totalidad de las DO con un número importantísimo de bodegas y de viticultores.

Una de sus demandas es que sean incluidos en el marco de la Organización Interprofesional del Vino en España como miembros de pleno derecho, con voto y voz...

Con nuestra asociación no se ha contado desde un principio por su parte, un grave error, ya que facilitaría mucho el funcionamiento porque somos los que representamos prácticamente a todo el sector. Lo reivindicamos en su momento y lo seguimos haciendo. Se nos ha invitado a una comisión consultiva con voz pero sin voto, creemos que no son las formas, la asociación debe ser un socio más de pleno derecho como el resto, que es lo justo y lo propio de una organización como la nuestra.

¿Cómo ha sobrevivido el sector del vino a la crisis?

Lo está haciendo. Es complicado y algunos lo han pasado bastante mal como otras empresas de otros sectores. Estamos hablando de un producto que no es de primera necesidad y a la hora de prescindir de él, el consumidor lo hacen. Aún así, el trabajo que se está haciendo fuera de nuestras fronteras con la exportación consigue que cada día haya una cierta rentabilidad tanto en bodegas como en viticultores, mucho menor de la que fuera necesario y nos gustaría, por supuesto, pero las alternativas que tenemos tampoco son muchas. Hay que seguir trabajando en conservar la calidad de cada zona, que es lo que nos está permitiendo hacer unos vinos de calidad, y promocionarnos tanto a nivel nacional como fuera de nuestras fronteras, que es por donde pasa el futuro y por donde hay más margen de crecimiento.

¿Deben renovarse los consejos reguladores?

Los consejos ya tienen sus funciones, que son velar por la calidad y dar a conocer el producto. Muchas veces quizás porque no se obtenga una rentabilidad superior a la que se estaba obteniendo somos dados a cambiar o modificar. No es que los consejos sean perfectos, pero esos cambios no deben hacer perder las características propias por las que son conocidos tanto a nivel nacional como internacional, y que en la mayoría de los casos no te estaba dando ningún problema.