El encausado, J.J.B., se ha reconocido autor de un delito de depósito de armas de guerra y de otro delito continuado de daños, en los que el tribunal le aplica las atenuantes de alcoholismo y reparación del daño, y por ello la condena ha quedado finalmente reducida a cinco años y un día de prisión y al pago de una multa de 2.160 euros, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas. El juicio, por tanto, no ha llegado a celebrarse, aunque sí han comparecido los titulares de dos de los vehículos dañados, Abraham G.J. y Belén C.D., para manifestar su renuncia a las indemnizaciones que pudiera corresponderles. El propietario del taxista que también sufrió daños, Antonio M.M, ya había sido indemnizado con anterioridad por el condenado con más de 2.700 euros, de ahí la atenuante aplicada de reparación del daño, informa Europa Press.