Detenidos 11 comerciales por falsear contratos para cumplir sus objetivos

A.G.M.
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La Policía les dejó en libertad con cargos bajo la acusación de los delitos de estafa y falsedad documental · No obtenían más lucro que el llegar a los mínimos de ventas que se les exigía

Detenidos 11 comerciales por falsear contratos para cumplir sus objetivos

La Policía ha esclarecido una serie de estafas que, presuntamente, se cometieron en los últimos meses en Valladolid por parte de hasta 11 comerciales de dos compañías distintas del sector de la energía, que vendían electricidad y gas. La investigación ha sido llevada por agentes del Grupo de Delincuencia Económica de la Brigada Provincial de Policía Judicial, de la Comisaría Provincial de Valladolid, que, en un principio, dejaron en libertad a los once vendedores, aunque bajo la acusación de presuntos delitos de falsedad documental y estafa, de los que responderán ante un juez.

De los once, seis llegaron a ser detenidos, mientras que los otros cinco simplemente declararon en Comisaría como imputados. Se les acusa de cambiar de contrato de compañía suministradora de luz y gas a personas sin que estas lo hubiesen autorizado.

La operación se divide en dos fases, puesto que, desde principios del año 2012 hasta mediados del año 2013, ya se recibieron diversas denuncias que acabaron con dos detenidos y dos imputados. En la segunda, llevada a cabo en estas últimas semanas, se dio con los otros cuatro detenidos y los tres imputados más, después de que la Policía centrase su investigación en los comerciales contratados para la campaña de cambio de compañía.

La investigación determinó que estos comerciales usaban las bases de datos de clientes de otras compañías para, directamente, sin llegar a ofrecérselo, hacerles contratos con las empresas para las que estaban trabajando ellos. Los titulares de los contratos que supuestamente falsificaron los vendedores investigados negaban haber firmado nada y, además, se daba la circunstancia de que ni tan siquiera coincidía el número de cuenta bancaria que figuraba en los contratos y el real de todos esos clientes.

Sin lucro directo. Por ello, a juicio de los agentes, está claro que la intención de los imputados no era otra que falsear el documento mercantil, tal como explicaron a este diario fuentes policiales, que detallaron, igualmente, que los imputados no se lucraban de un modo directo de esas estafas, sino que su objetivo no era otro que poder cumplir con los mínimos de contratos que les exigían para llegar a los objetivos marcados por la empresa tanto para cobrar como para seguir con su trabajo.