Interior controla en Valladolid 187 objetivos islámicos para evitar su radicalización

A.G.M.
-

La provincia es una zona de baja intensidad islamista, por debajo de Burgos o Segovia

Interior controla en Valladolid a 187 personas o núcleos islámicos susceptibles de radicalizarse. «No son terroristas ni siquiera posibles islamistas. Son personas a las que se controla por si acaso diesen el paso, que eso es solo un clic en la cabeza de cada uno», tal y como explican a este periódico fuentes de la lucha antiterrorista. 187 que serán algunos más mañana y que irán agrandando un informe en el que se marca en rojo a las personas que «puedan comulgar con la idea que defienden los terroristas del Estado Islámico, al ISIS» o que «demuestren una mayor cercanía hacia la radicalidad».


Más allá de las personas y de los movimientos que de manera individual puedan hacer -se vigila especialmente los viajes a ciertas zonas de Oriente, a Marruecos o a Francia-, el control se centra en el entorno de locutorios, carnicerías ‘halal’ y de mezquitas. De las tres que hay actualmente (una en la calle Granada, en Las Delicias, otra en el barrio de La Rondilla y la de La Paz, la principal, en Pajarillos) y de la que se está construyendo en las inmediaciones de la carretera de Villabáñez y la Ronda Interior Este, en la calle Santa Eulalia, que tendrá capacidad para más de mil personas. «Son puntos en los que pueden actuar los captadores y hay que estar muy pendientes», tal y como apuntan estas mismas fuentes.


Esa lista de 187 puntos que van actualizando desde el terreno los expertos en la lucha antiterrorista de la Guardia Civil y la Policía que hay destinados en Valladolid, está en manos del CITCO, el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado, un organismo impulsado desde el Ministerio del Interior y que ejecuta las labores de seguimiento a través de personal especializado, según se recoge en ‘La España de Alá’, un libro que ha publicado el periodista Ignacio Cembrero. En la lista nacional se llega a hablar de algo más de 34.000 nucleos de posible radicalización, la mitad de ellos situados en el arco mediterráneo, tal como se destaca en la publicación (La Esfera de los Libros) de este corresponsal que ha trabajado en El País y El Mundo durante 30 años, destinado en Oriente Próximo y el Magreb, así como en Bruselas.

 

1.448 puntos en la región. Cataluña (9.836), Valencia (3.758) y Murcia (2.789), así como Madrid (3.288), son las zonas en las que se controla a más personas por parte del CITCO, tal como hace constar por Cembrero, que desvela en su libro un listado con el que se hace al mismo tiempo una radiografía de la lucha contra este terrorismo de origen islámico en España. Así, la concentración de un mayor o menor número de esos núcleos de vigilancia ante una hipotética radicalización va muy de la mano a la existencia de más o menos población musulamana. Así, en Castilla y León se habla de 1.448 objetivos a los que, en mayor o menor medida, se sigue, pero se está muy lejos de los 4.535 que se controlan en Andalucía, por citar otro ejemplo.


En el caso de Valladolid, donde la población musulmana que hay en la provincia ronda los 4.000, se habla de esos 187 puntos (ya sea personas o núcleos) en los que se lleva a cabo un seguimiento o un control de sus movimientos. La provincia es una de las que está en la zona denominada como de baja intensidad, por debajo incluso de las cifras de otras cercanas como Burgos (243) y Segovia (228). Está por encima, eso sí, de León (173), Ávila (152) Salamanca (138 puntos de vigilancia), Palencia (136), Soria (127) y Zamora (64).