Una de las imágenes más recordadas que dejaron las sesiones plenarias de 2018 en el Congreso fue la del rifirrrafe entre el ministro de Exteriores, Josep Borrell, y el diputado de ERC Gabriel Rufián que acabó con la expulsión del Hemiciclo del independentista que se marchó acompañado de todo su grupo. No fue el único enfrentamiento que protagonizó una de las parejas políticas peor avenidas de la Cámara Baja que se han dedicado gruesas palabras, como cuando el secesionista llamó a Borrell «hooligan» y el socialista le acusó de vertir en el Parlamento solamente «serrín y estiércol». Ahora, el portavoz de Esquerra y el miembro más veterano del Gobierno vuelven al centro de la polémica.

Y es que Rufián agitó ayer la actualidad política y la negociación presupuestaria al asegurar que Podemos, se supone que con el beneplácito de Moncloa, le ofreció «la cabeza» de Josep Borrell, a cambio de su apoyo a las Cuentas que llegarán el próximo lunes al Congreso.

La revelación del independentista fue desmentida de forma inmediata y rotunda por la formación morada que alegó esas palabras al «afán de llamar la atención» del dirigente republicano. «No sé con quién habla Rufián en los pasillos, pero le garantizo que Podemos no le ha ofrecido eso en ningún caso», remarcó la portavoz adjunta del grupo, Ione Belarra.

A pesar del desmentido de su presunto interlocutor, el independentista insistió en que los de Pablo Iglesias sondearon a ERC para saber si su voto a los Presupuestos cambiaría si «presionaban para tumbar a Borrell». «Nosotros le dijimos que aquello no era House Of Cards, que no queríamos tumbar a nadie y que ojalá el problema fuera solo el ministro de Exteriores. Sin más», explicó. 

Por su parte, el titular de Exteriores ni siquiera quiso entrar en lo que calificó de «infrapolítica» a la que no hay que prestar atención.

«extraordinario candidato». La duda ya estaba en el aire y el resto de la oposición entró al trapo de la polémica, sobre todo teniendo en cuenta de que apenas 24 horas antes, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, admitiera que Borrell podría ser «un extraordinario candidato» a las elecciones europeas.

El PP está convencido de que esa conversación «existió» y que Podemos ofreció a ERC «la cabeza de Borrell», según señaló la portavoz popular, Dolors Montserrat, porque ha sido Pablo Iglesias desde su posición de «vicepresidente económico» quien ha pactado los Presupuestos «en nombre de Sánchez, en una cárcel». «Ese es el precio que paga el presidente», sentenció Montserrat tras denunciar que «jamás había pasado una cosa tan denigrante» en España como que «unos comunistas pacten las Cuentas con los independentistas que quieren romper España».

A Ciudadanos tampoco le sorprendió la confesión de Rufián. El diputado Toni Roldán apuntó no sabe si «las ansias de quedarse en el poder» de Sánchez «pasan por sacrificar a miembros» de su Ejecutivo, pero cree demostrado que «está dispuesto a conceder mucho» a los secesionistas catalanes.