La amenaza de lluvia, tras una Semana Santa donde no se canceló ninguna procesión aunque sí hubo de modificarse el traslado del ‘Cristo Yacente’ del Sábado Santo, volvió a manifestar ante la opinión pública el celo y cuidado de su patrimonio que tienen los responsables del Museo Nacional de Escultura. Las cuatro gotas que cayeron a media mañana sobre la capital vallisoletana fueron las causantes, precisamente, de que la Procesión del Encuentro de Resurrección saliese únicamente con las dos imágenes titulares de las dos cofradías celebrantes,Nuestro Padre Jesús Resucitado y del Santo Sepulcro, que alumbraron las tallas de madera policromada de ‘Nuestro Padre Jesús Resucitado’ (Ricardo Flecha, 1994) y la ‘Virgen de la Alegría’ (Miguel Ángel Tapia, 1997).

Por contra, el grupo procesional del ‘SantoSepulcro Vacío’(Alonso y José de Rozas, último cuarto del sigloXVII), se quedó a cubierto y es que el subdirector del centro museístico, Manuel Arias Martínez, prohibió a primera hora de la mañana a la hermandad titular su salida procesional, entendiendo esta salida como«riesgo innnecesario» y dado que no era uno de los pasos principales del ‘Encuentro’.

Pese a todo, las precipitaciones respetaron en todo momento la procesión de la mañana de ayer entre Jesús Resucitado con la Virgen de la Alegría, donde miles de personas asistieron a la tradicional plática del arzobispo y suelta de palomas en la Plaza Mayor, donde también se dieron cita el resto de las hermandades vallisoletanas, las otras 18 cofradías. Previamente, la Santa Iglesia Catedral acogió la solemne misa pascual donde el también presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez, subrayó que el lugar de Jesús y María en una fiesta de «misterio y de luz», al tiempo que ha pedido al Señor poder vivir estos momentos con esperanza, «no desalentados ni tristones», además de poder ser partícipes de la Resurrección «en este año concreto», el que «cada uno vive con sus situaciones», tal y como recogió Europa Press.