ETA pierde el núcleo de su aparato logístico tras seis nuevos arrestos

EUROPA PRESS
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La Guardia Civil, en colaboración con las Fuerzas de Seguridad galas, detiene en Francia a los encargados de los zulos, la falsificación de documentos y el robo de coches de la banda

SEIS DETENIDOS EN FRANCIA EN UNA OPERACIÓN CONTRA EL APARATO LOGÍSTICO DE ETA

La detención ayer de seis presuntos miembros de ETA en Francia ha supuesto, según el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, la desarticulación del «núcleo esencial del aparato logístico de la banda» que ejercía como soporte «fundamental para su supervivencia». Los terroristas capturados en Francia con la colaboración de las Fuerzas de Seguridad galas son Raúl Aduna,  Andoni Goikoetxea, Igor Uriarte, Julen Mendizábal, Ekhiñe Eizaguirre y Kepa Arkauz.

 «Estamos ante un día importante para el relato del final de la organización. A la banda le queda cada vez menos», celebró el dirigente. «O se disuelve o la reduciremos a unas siglas, como los Grapo. La ETA que hemos conocido durante décadas ya no va a volver», enfatizó el ministro en una reivindicación de la «derrota policial» de la banda criminal.

La operación desplegada durante la madrugada por la DCRI francesa y la Guardia Civil tiene su origen en el arresto el pasado octubre de la responsable del aparato logístico, Izaskun Lesaka, también en territorio galo y también con información de la Benemérita.

 Desde la declaración de alto el fuego de ETA, esta estructura había adquirido todo el protagonismo al desempeñar la función de mantenimiento y aprovisionamiento de los militantes de la organización que permanecen en la clandestinidad, tanto en Francia como en otros puntos de Europa.

 El despliegue policial se saldó con tres operaciones simultáneas en distintos lugares de la geografía francesa separados por 600 kilómetros entre sí. Raúl Aduna, presunto cabecilla del grupo, y Andoni Goikoetxea, «experto en explosivos», según el ministro, fueron arrestados al sur de la localidad de Limoges. Ellos dos eran los encargados de controlar la red de zulos de ETA y gestionar el material.

Aduna fue uno de los 14 huidos de la macrooperación desplegada a finales del año 2009 en el País Vasco y Navarra en la que fueron detenidos más de 30 jóvenes acusados de pertenecer a la cantera de la banda terrorista. Los expertos sospechan que decidió incorporarse a ETA tras escapar de aquella operación contra Segi.

Por su parte, Goikoetxea fue captado por la banda a finales de la década de los 90 y la Audiencia Nacional llegó a la conclusión de que participaba en la búsqueda de posibles objetivos. Así, proporcionó la información que utilizó la organización para matar en julio de 2001 al ertzaina Mikel Uribe.

Otros dos presuntos criminales, Ekhiñe Eizaguirre y Kepa Arkauz, fueron arrestados en el suroeste de París. En su caso eran los encargados de realizar las falsificaciones de documentos de identidad o las matrículas para los coches. Un experto de la Guardia Civil explicó que tenían un alto nivel técnico en esta función por lo que a ETA le va a ser «imposible» reemplazarlos en un corto período de tiempo y difícilmente en el futuro.

 Los últimos dos detenidos, Igor Uriarte y Julen Mendizábal, eran los encargados de robar los coches para la banda. Aunque cada miembro de la organización está autorizado y capacitado para sustraer vehículos, estas dos personas tenían esa misión encomendada en exclusiva y se les atribuye el robo de entre 20 y 30 coches.

Las Fuerzas de Seguridad otorgaron especial relevancia a esta operación por la cantidad de información que puede reportar sobre el estado actual de la banda.

Josu ternera. Durante la presentación de la operación desplegada en Francia, la Guardia Civil aseguró que cree que Josu Ternera tiene un papel destacado en la cúpula del aparato político de ETA.

Fuentes de la lucha antiterrorista confirmaron que el histórico miembro de la banda viene desempeñando un papel protagonista en la organización desde que ésta se propuso sentar al Gobierno en una negociación para abordar lo que ellos denominan «las consecuencias del conflicto», es decir, la cuestión de los presos, el desarme y la salida de las fuerzas de seguridad y el ejército del País Vasco y Navarra.

Las Fuerzas de Seguridad no habían vuelto a situar a Ternera en cargos de responsabilidad dentro de la banda desde que en 2006 el que fuera jefe de ETA, el recientemente fallecido, Javier López Peña, alias Thierry, le apartase de la organización.