Emoción y devoción fueron los sentimientos de los cientos de riosecanos y visitantes que ayer Martes Santo presenciaron la procesión en la que, desde la iglesia de Santiago, salió a la calle el paso con el bello Cristo de la Clemencia. Esta procesión, que el pasado año se suspendió por culpa de la lluvia, se empezó a realizar en el año 2010 al tiempo que se fundó una cofradía con el mismo nombre que el Cristo.
En una apacible noche, la procesión se inició en la iglesia de Santiago. La altura de la cruz provocaba que los doce cofrades de la joven hermandad tuvieran que esforzarse para que la cruz pudiera pasar bajo el dintel de la puerta, en medio de los aplausos de todos los presentes.
Tras su emocionante salida, el Cristo de la Clemencia recorrió las principales calles riosecanas hasta llegar al corro de San Miguel, desde donde entró a la iglesia de Santa María, en la que el sacerdote de la parroquia, Juan Carlos Fraile, pronunció, ante el paso, una breve oración. Más tarde, el paso salió por la puerta principal de la iglesia al corro de Santa María, desde donde la procesión llegó de nuevo a la iglesia de Santiago, para finalizar con el siempre emotivo canto de la Salve.
Los cofrades de la Hermandad del Cristo de la Clemencia acompañaron a su paso luciendo su indumentaria con túnica de lienzo blanco con careta de terciopelo morado. La música de la procesión la puso la banda de la Junta Local de Semana Santa, que lleva el nombre de Cristo de la Clemencia, siendo muchos de sus componentes de la cofradía.
Sin duda alguna, el protagonista de esta procesión volvió a ser el Cristo de la Clemencia, que brilló con luz propia entre las estrechas calles riosecanas. Se trata de una magnífica talla que realizara el escultor riosecano Pedro de Bolduque en 1593 y que se conserva en la sacristía de la iglesia de Santiago. Hace años esta talla procesionó el Viernes Santo por la mañana.
esta tarde, vía crucis. Esta tarde se celebrará desde la iglesia de Santa María, a partir de 19.30 horas, el Vía Crucis con el Cristo del Amparo, que en su transitar sin andas por las calles riosecanas se encontrará frente a la iglesia de Santiago con el paso de la Virgen Dolorosa en un momento de gran emoción. Las procesiones del Jueves y Viernes Santo comenzarán a las 20.00 horas. Antes tendrá lugar el popular desfile de gremios.