Pinchazo importante del Carramimbre CBCV en la cancha del colista. Los de Paco García cayeron frente a CB Prat (73-71) después de un mal primer cuarto (23-10) que condenó a los vallisoletanos. Los visitantes remaron con trabajo y sacrificio pero murieron en el último minuto del choque, al que llegaron con vida a pesar del lastre que arrastraban.
A pesar de las advertencias de Paco García en la previa, el Carramimbre CBCV firmó una pésima salida y sus opciones de victoria se vieron mermadas a las primeras de cambio. Un 5-0 de inicio precedió a otro demoledor 8-0 que solo se vieron interrumpidos por una canasta de los vallisoletanos. El balance: un 13-2 con nueve puntos de Marc Blanch que obligó a Paco García a solicitar un tiempo muerto para reajustar el plan.
El CBC, a remolque, se veía abocado a remar de nuevo y a desfondarse para igualar la contienda. Y las palabras de Paco García mejoraron las sensaciones de los suyos, pero el dominio continuó en la mano de los locales. Los de Dani Miret continuaron con su alto nivel de acierto para alcanzar máxima de 14 (20-6), aunque en los dos últimos del periodo inaugural, el Carramimbre, desdibujado completamente, logró maquillar el resultado mínimamente (23-10).
Marc Blanch continuó desarbolando la defensa carmesí una y otra vez y se fue hasta los 14 puntos para mantener a raya a unos visitantes (27-12) que solo a partir de entonces pudieron secar al exterior. Sin los puntos del barcelonés, el Carramimbre empezó a sentirse más cómodo en defensa y encadenó varias posesiones sin recibir puntos. La mejoría en la circulación de balón de las ardillas redujo las pérdidas en este segundo periodo y permitió tiros liberados para los vallisoletanos, quienes empezaron a ver el aro con más facilidad. Dos triples consecutivos de Greg Gantt y de Óscar Alvarado (29-18) impulsaron a unas ardillas que, a pesar de todo, llegaron vivas al descanso (41-29)
El tiempo de descanso no enfrió la inercia positiva del Carramimbre. Los visitantes abrieron la segunda parte con un parcial de 0-6 y bajaron de los diez puntos por primera vez desde los envites iniciales (41-35). Con casi dos cuartos completos por disputarse, gran parte de la remontada se había cumplido, aunque aún faltaba lo más complicado: consumarla. Y ese vértigo le jugó una mala pasada al conjunto carmesí. De rozar la igualada, las ardillas se fueron hasta una desventaja de 13 puntos tras un parcial final de 15-8 liderado por los locales Wesley Sena y Pep Busquets. Los de Paco García, tan cerca y a la vez tan lejos, encararon los últimos diez minutos con una machada importante por delante (58-45).
Ajenos al esfuerzo realizado para competir hasta el final, otro arranque de acierto y de orgullo del Carramimbre propició un parcial de 2-10 de salida que obligó al técnico local, Dani Miret, a solicitar un tiempo muerto (60-55). Los potablava, con solo tres triunfos en su casillero, tenían en la mano el cuarto y no querían cedérselo a un Ciudad de Valladolid que se mantenía a rebufo.
Sin hacer mucho ruido, los vallisoletanos se colocaron a tan solo una posesión a falta de dos minutos (66-63) y dejaban atrás su mal inicio Comenzaba un partido totalmente nuevo, aunque la fatiga empezaba a hacer mella en sendos conjuntos. Un dos más uno de Sergio de la Fuente insufló vida a los suyos (68-66) en el último minutos, pero una canasta de Pep Busquets y la sangre fría de Marc Rubín de Celis eclipsaron un triple de Álex Reyes y terminaron ahogando a un Carramimbre que lo intentó hasta la última posesión, pero que acabó muriendo en la orilla, confirmando así el pinchazo en la cancha del colista (73-71).