Por el momento y según informaron fuentes del Arzobispado de Valladolid, se desconoce si se trata de un acto de animadversión contra la Iglesia, de vandalismo o de enemistad entre los vecinos, dado que la capilla fue una donación realizada por un miembro de la cofradía de la Virgen de la Salve, patrona de esta localidad. La Guardia Civil de Valladolid ya ha puesto en marcha una investigación.