La meteorología adversa obligó a Paco Herrera a trastocar, en cierta forma y como informa el club, sus planes puesto que la hierba natural del campo habitual del entrenamiento estaba muy dura por la fuerte helada caída en Valladolid esta noche y optó por trasladar el entrenamiento al nuevo campo de hierba artificial, recientemente estrenado, donde compartió trabajo con el filial.