De media, los observadores pudieron ver una cada dos minutos, algunas de ellas muy brillantes en función de la presión lumínica del lugar. Es el caso de la estación de Corcos-Aguilarejo, donde se encuentra una de las esclusas del Canal de Castilla en su ramal sur hacia Valladolid. La actividad de las perseidas se multiplica en esta época, entre el 17 de julio y el 24 de agosto.