Este hombre será investigado por los delitos de amenazas, desorden público, contra los sentimientos religiosos y daños. El incidente se produjo en torno a las 18.30 horas del sábado, 3 de junio, cuando el joven, marroquí con permiso de residencia de estudiante, entró en San Pablo al grito de "Alá es grande" durante el desarrollo de una boda, tras lo que fue reducido por los invitados.