Al respecto, recordó que Castilla y León tiene una de las tasas más altas en vacunación, solo por detrás de La Rioja, pero la idea es incrementarla al menos en los tres puntos perdidos, pasando del 61 al 64% "e incluso si es posible mejorar el porcentaje". A su vez incidió en que en la presente campaña de vacunación se incidirá en los enfermos crónicos y en el personal sanitario de riesgo.