La Audiencia Nacional ha procesado por delitos de intento de integración en grupo terrorista y autoadoctrinamiento a Ali Afarkhane, el marroquí residente en el barrio de Las Delicias que fue detenido el 26 de septiembre por la Policía, semanas después de viajar a Turquía e intentar pasar a Siria e unirse allí al Dáesh. Su papel, según el juez, supera "el de mero simpatizante".