El fallecido presentaba dos golpes "muy fuertes" en la cabeza, "incompatibles con impactos sufridos dentro del río", así como "pinchazos y heridas presuntamente infligidas por arma blanca", según confirmó el subdelegado del Gobierno en Valladolid. Fuentes cercanas al caso detallaron a El Día de Valladolid que se trata de un "delincuente habitual", cuya desaparición no había sido denunciada.