Los firmantes le piden que, si no está dispuesto o no es capaz de llevarlo a cabo, "presente su dimisión". La misiva remarca que su misión es velar por la unidad en lugar de "generar y permitir la confrontación entre militantes de opiniones diferentes y los ataques verbales e insultos a dirigentes del partido", en referencia al incidente en el que acusaron de traición a Soraya Rodríguez.