El detenido utilizaba plataformas de Internet donde ofrecía empleos en supuestos centros de masajes o saunas. Tras un primer contacto, les exigía que le mandaran una fotografía y, cuando la aspirante al puesto de trabajo acudía a la cita le solicitaba que se quitase la ropa para comprobar si reunía los requisitos para el empleo, momento en el que aprovechaba para cometer los abusos.