La Audiencia de Valladolid ha impuesto penas que suman un total de 35 años de prisión a los cuatro acusados en la Operación Yogur contra el tráfico de drogas que, a diferencia de otros veintiocho inmersos en el mismo proceso, fueron los únicos que se negaron a pactar sus condenas. El fiscal había solicitado para ellos casi 42 años de cárcel en total y multas por importe de 1.590.000 euros.