La protesta minera convocada por el sindicato UGT reunió hoy en las calles de Ponferrada a unas 2.000 personas que clamaron por el futuro del carbón autóctono y los puestos de trabajo del sector. En un ambiente festivo, representantes del sector llegados de Palencia y Asturias acompañaron a los mineros bercianos, que también recibieron el apoyo de numerosos alcaldes de las cuencas, así como representantes políticos de ámbito autonómico.