Sinopsis oficial
En una pequeña cala cerca de Marsella, Angèle, Joseph y Armand vuelven a la casa que construyó su padre. Angèle es actriz y vive en París. Joseph está enamorado de una chica mucho más joven que él. Armand es el único que se quedó en Marsella para llevar el pequeño restaurante familiar. Es el momento de descubrir qué ha quedado de los ideales que les transmitió su progenitor, del mundo fraternal que construyó en este lugar mágico en torno a un restaurante para obreros. Pero la llegada de una patera a una cala vecina hará que sus reflexiones adopten otro rumbo.
La crítica -
Por J.M.S.
Tras Una historia de locos, el director galo de origen armenio, Robert Guédiguian, vuelve a uno de los relatos cinematográficos que tanto le gustan sobre reconciliación, solidaridad y comprensión hacia los demás. Porque su cine siempre posee un toque social.
Todo esto lo consigue a través del regreso de una actriz al hogar de su padre, al que no ve desde hace años debido a una tragedia familiar. La cercanía a su progenitor, ahora gravemente enfermo, y el estar rodeada de sus hermanos y amigos que la quieren le devolverán la esperanza y también la paz interior.
La película discurre plácida en un entorno extraordinario: una cala preciosa frente a las costas de Marsella , que resulta ser el último bastión natural, ante la especulación inmobiliaria de la zona, gracias al tesón de los hermanos de la protagonista por defender el sueño de su padre.
El único punto discordante de esta película, muy idealista, es un suicidio que parece no conmocionar a nadie, justificándolo como algo inevitable ante los cambios que se avecinan.
Como es usual Guediguian ha contado al frente del reparto con su esposa en la vida real: Ariane Ascaride y otro de sus actores habituales: Jean Pierre Darroussin.