Sinopsis oficial
A raíz de la revolución sexual y la progresión del movimiento feminista, el partido de tenis que tuvo lugar en el año 1973 entre la número uno mundial del tenis femenino Billie Jean King y el excampeón de tenis Bobby Riggs fue anunciado como “la batalla de los sexos” y se convirtió en uno de los eventos deportivos más vistos de todos los tiempos, alcanzando la cifra de 90 millones de espectadores en todo el mundo. Mientras la rivalidad entre King y Riggs alcanzaba su máximo apogeo, fuera de la cancha, cada uno de ellos libraba batallas más personales y complejas. El partido desencadenó muchos debates sobre la igualdad de género y el movimiento feminista.
La crítica -
Por J.M.S.
Figura legendaria para las feministas, Billie Jean King era, a principios de los 70, una campeona tenis que inició la lucha por la igualdad de salarios entre hombres y mujeres en su deporte. Curiosamente, el evento que le sirvió de catapulta fue un partido entre ella y un bocazas ex campeón llamado Bobby Riggs, al que le gustaba llamar la atención.
Aparentemente la película se anuncia en su publicidad como ese choque deportivo que publicitariamente se anunció como “la batalla de sexos”, pero aprovecha para narrar pormenorizadamente los dilemas personales que ambos contrincantes tenían fuera de la cancha. Ella insegura por su identidad sexual, lo que le llevó a liarse con su peluquera cuando su marido no le acompañaba, y él con una ludopatía que hizo peligrar su matrimonio.
Desgraciadamente la película se centra más en el aspecto personal que deportivo de la historia, dejando incluso en un segundo plano la lucha por la equiparación de salarios, lo que lastra el resultado final.